El mercado mundial de granos se ha caracterizado tradicionalmente por producir comodities, entendiendo por estos como bienes y productos que se comercializan sin ningún tipo de valor agregado, para luego ser utilizados como materia prima de otros bienes de la cadena agroalimentaria. En los últimos años comenzaron a aparecer en el mercado la figura de los especiales, haciendo referencia a bienes producidos con alguna cualidad diferencial, tecnología de insumo o proceso que le dan un valor agregado al producto. En los años venideros, cada vez más se les presentará a los productores argentinos, la necesidad de considerar en sus ecuaciones, las nuevas variables en función de las oportunidades que va ofreciendo el mercado en productos novedosos o de un valor diferencial.
En el corriente año, la Cooperativa Agrícola Ganadera mediante un convenio con ACA (Asociación de Cooperativas Argentinas) decidió licenciar el híbrido ACA 493, un material muy utilizado por clientes-exportadores que utilizan este maíz convencional no GMO (organismo no genéticamente modificado) como insumo básico para la producción en este nicho del mercado.
Si bien la cooperativa ha venido multiplicando variedades de soja, trigo, cebada y avena, nunca había producido un híbrido de maíz. Luego de adquirir la licencia del material, el equipo técnico de la cooperativa encabezado por los Ing. Agrónomos Lisandro Dumón y Rodolfo de Ortúzar se puso en contacto con una empresa privada encargada de llevar a cabo la producción, en el norte de la Prov. de Bs As, contando con equipos de riego, maquinaria especializada y mano de obra capacitada para llevar a cabo todo el proceso, a partir del cruzamiento de las líneas parentales de ACA necesarias para lograr el híbrido. El material en cuestión, el ACA 493 es un tipo de híbrido simple, no genéticamente modificado, con características fenotípicas tales como, textura de grano duro, de color anaranjado. Entre las principales características a destacar podemos decir que posee un altísimo potencial de rendimiento, con 120 días a madurez relativa, una velocidad de secado aceptable y con muy buen comportamiento agronómico. Es un material recomendado para una amplia zona de adaptación, la cual incluye SE de Córdoba, Sur de Santa Fe, Norte y Sur de la provincia de Bs As, con una densidad de siembra recomendada que varía entre 65.000-75.000 pl/ha, dependiendo del régimen hídrico y de la calidad del lote.
De esta manera, con ansias de seguir dando respuesta a nuestros socios y clientes, fue que nos embarcamos en este nuevo desafío, donde el trabajo en equipo, la innovación y nuestro compromiso social, son los pilares fundamentales que nos llevara a transitar estos tiempos de oportunidades.